Haz lo que te apasiona

El día que di la noticia que dejaba todo para viajar por el mundo, muchos amigos me llamaron y me escribieron a preguntarme si era cierto y al explicarles con más detalles mi decisión, casi todos terminaban sus frases con un «ojalá yo pudiera encontrar lo que me haga feliz». A ellos, que me inspiraron para escribir esta entrada, les contestaba: -Busca lo que te apasiona, haz lo que quieras hacer, independientemente de la parte económica y de lo que la sociedad te dice que debes hacer, cuando lo encuentres podrás dedicarte a eso y tener la certeza que cada día de tu vida, serás feliz».

Mi decisión así como fue aceptada y aplaudida por muchos también fue criticada por otros, casualmente, los que siguen los parámetros de la sociedad al pie de la letra y que no pueden entender que hay estilos de vida diferentes, así como también existen diferentes maneras de trabajar que estar detrás de un cubículo ocho horas al día, cinco (o seis) días de la semana.

Yo era consciente que eso iba a pasar y sin embargo seguí adelante con mi decisión porque era lo que me hacía feliz  a mí, no a ellos.

Hace dos años yo no hubiera tomado la decisión de cambiar mi vida y hacer lo que realmente quería hacer por miedo al qué dirán, a ser criticada, señalada y honestamente no contaba con la madurez necesaria para afrontarlo. Durante mi año estudiando en Europa me di cuenta que existen varios estilos de vida, no hay una ley que te diga que debes vivir tu vida así o «asá», todo depende de ti, de lo que quieras hacer, de que tan alto puedas llegar para alcanzar tus sueños.

Piénsalo, ¿Para qué está hecha la vida? – ¿Para estar feliz los viernes porque llega el  fin de semana y los domingos tener la depresión «pre-lunes»? Para mí no tiene ningún sentido, para mí, es señal de que algo no está marchando bien en mi vida. Claro que, para muchos es lo correcto porque es lo que se «debe» hacer y como se tiene que vivir y no me malinterpretes, no te estoy diciendo que dejes todo, que agarres tus «motetes» y te vayas (ese era mi sueño, cada quién tendrá el suyo), tampoco que dejes de trabajar para vivir del aire, NO. Te estoy diciendo que hagas lo que te hace feliz, lo que te apasiona, que persigas tus sueños y no vivas tu vida llenando las expectativas de otros. Trabaja en lo que te gusta.

Una de las profesiones que más admiro es la de los médicos (especialmente aquellos que la ejercen con amor y lo anteponen al dinero), estudian toda su vida, se trasnochan horas, días y semanas enteras y todo lo hacen con una pasión que les dura toda la vida. Solamente que hoy en día ya es tan común escuchar «voy a estudiar medicina» que olvidamos que verdaderamente se necesita tener vocación y amor a la carrera para hacerlo.

Fuente

Hace unos días un amigo me llamó para decirme que quería dejar todo en Colombia para irse a vivir en una isla en Grecia y dedicarse a la fotografía. Yo le dije -Si eso es lo que te hace feliz, hazlo-. Yo soy de las que tiene la firme convicción de que la vida es muy corta y muy frágil para no hacer lo que te hace feliz.  Si eres feliz vendiendo mangos en una playa en Tailandia, hazlo. Si eres feliz dejando tu carrera para dedicarte a la fotografía, hazlo. Si eres feliz (y loco como yo) de dejar todo e irte de viaje, hazlo. Si te hace feliz dejar tu carrera de abogado para abrir tu propio restaurante (caso de una amiga a quién se lo aplaudo), hazlo.

NO ESPERES APROBACIÓN NI PERMISO DE NADIE

Deja de esperar la aprobación de otros, busca apoyo, sí. Escucha consejos de personas que tengan más conocimiento que tú en algún campo específico, pero no te escudas debajo de éstos para cubrir tu sensación de inseguridad esperando que resuelvan tus problemas e incertidumbres.

Yo personalmente, antes de tomar la decisión llamé a mi mamá; no para pedirle permiso -hola ma, te llamo porque quiero viajar con mi mochila por tiempo indefinido, ¿me dejas? ¿puedo? please, please- sino porque además de ser la mamá con la mentalidad mas abierta que conozco, es mi mejor amiga, y ella más que nadie sabe, que a los hijos hay que dejarlos ir a cierta edad, en cierta época de la vida. Hay que darles alas y enseñarlos a volar, a cumplir sus sueños (sea el que sea).

DESCUBRE TU PASIÓN

Encontrar tu verdadera pasión es el camino directo para que ames lo que haces.  Nadie puede ayudarte a descubrir lo que te apasiona, solo tú puedes hacerlo.  Todos tenemos gustos y talentos diferentes. Sí, todos. Descubrir cuáles son y lo que puedes hacer con ellos, es tu tarea.  Pregúntate siempre -¿Qué es lo que me emociona?- Piensa en todo lo que te gusta leer, tipos de blogs que sigas, lo que te hace soñar despierto. Experimenta, observa, acaba con tus miedos y ¡Reinvéntate!

No siempre tu carrera es tu pasión. Yo estudié administración hotelera y dos años trabajando en un hotel fueron suficientes para saber que no me apasionaba mi trabajo. Estar metida todo un día, todos los días de mi vida en un hotel no era lo mío. Mi pasión siempre fue escribir y mi sueño era dar la vuelta al mundo pero era una locura no vivir de mi carrera. Lo que necesitaba era tiempo e inspiración para que la «bomba estallara».

Todos los sueños son igual de válidos, lo importante es que te decidas a cumplirlos y aunque el camino no será fácil (porque créeme que no lo será) la recompensa valdrá la pena.

Si quieres lograr tus sueños debes romper con viejos hábitos, abrir tu mente, enfrentarte a nuevos temores y tal vez, hacer cosas que antes no te hubieras atrevido a hacer. Toma riesgos, aventúrate, explora, atrévete a dejar la comodidad de tu casa para hacerte cargo de tus sueños.

Si ya lo descubriste, como el abogado que abrió su restaurante, o el ingeniero que se dedicó a la fotografía, o el que se fue a vender mangos a Tailandia (y dele, Lina insiste con los mangos por Asia) o el de crear tu empresa, ¡Enhorabuena! sigue haciendo lo que te hace feliz. Si por el contrario, aún estás en la búsqueda, no olvides que hay muchos, ¡miles! de sueños diferentes, no dejes de buscarlo y cuando lo encuentres no renuncies a él.

Y tú, ¿Ya encontraste tu pasión?